Titán, la más reciente tragedia ligada al naufragio más famoso del Mundo.

Norman Patrón. Océano Atlántico. Jueves, 22 de junio, 2023.

Desde el pasado Domingo 18 de junio de 2023 corrió rápidamente la noticia a nivel mundial de la desaparición en el radar y sistemas de comunicación de un sumergible utilizado para constantemente bajar casi 4mil kilómetros y recorrer las cercanías a los restos del Titánic, si, aquel legendario transatlántico que se hundió después de haber chocado con un Iceberg la noche del 14 de abril de 1912 y finalmente descansar hasta la actualidad pasadas las 2 de la mañana del día 15 del mismo mes y año, por casi 3 horas su agonía sería indescriptible, 1500 perecieron, 705 sobrevivieron.

Hasta finales de Agosto de 1985 sería redescubierto en una misión especial y desde entonces en por lo menos 200 veces ha sido visitado en su mayoría por expertos en el tema, apenas en el 2022 la gran novedad había sido que se había logrado realizar el más importante escaneo digital de la zona donde quedaron sus restos y con ello poder estudiar con más exactitud las causas de su accidente y las consecuencias finales que habrían hecho perecer al que en su momento sería el más importante, grande y lujoso barco de toda la historia, aunque para ser justos no es el peor desastre marítimo registrado y hoy en día sus dimensiones serían apenas una octava parte del barco más grande en existencia. Sin embargo, el más famoso y legendario definitivamente si lo es.

Ahora que estamos en el inicio de la tercera década del siglo XXI estaríamos hablando de que viajes que se han reservado por décadas para especialistas, se abren a la posibilidad de ser realizados por población “común y corriente” y esto lo coloco entre comillas porque aún estamos muy lejos de que alguien pueda ir al espacio por unos instantes si no puede pagar un boleto de 20 millones de dólares o en el caso del Titánic, $250 mil, para abordar por casi 10 horas un sumergible que lo lleve a las ruinas de lo que quedó del desastre marítimo que hoy se encuentra en varios museos del mundo en exhibición mediante objetos recuperados. Muchos de nosotros los hemos podido ver por fortuna en dichos lugares y realmente es una experiencia fascinante, especialmente si se es fan.

El tema del Titanic, por si mismo ya es un tema realmente apasionante, y en especial en este 2023 muchos celebramos aquel año en que vimos por primera vez la célebre producción ganadora de 11 Óscares de James Cameron, si, Titánic, cumple justamente 25 años de haber llegado a nuestras vidas, en el caso mío me inspiró enormemente en mi carrera profesional.

Bueno, regresando al tema del Titán, este jueves se dio a conocer que después de 4 días fueron encontrados los restos del pequeño sumergible Titán, tres turistas y dos tripulantes, todos muertos, aparentemente sin dolor después de una ultra rápida implosión, que no es más que la contracción de las partes del artefacto y de todo lo que se encuentre a su paso en cuestión de mircosegundos. Otro capítulo ligado al Titánic, ligado a la emoción y la fascinación por conocerlo antes de que desaparezca físicamente como lo han señalado varios conocedores, pues gracias a la biodiversidad que le rodea sus restos difícilmente quedarán intactos con el paso de los años, la corrosión y la desintegración natural no dejarán absolutamente nada del gran transatlántico dentro de los próximos 150 años.

Mucho se habla de que es casi imposible rescatar no solo los restos del sumergible, sino los restos de las personas en un lugar submarino en el cual estás resistiendo el peso del equivalente al Empire State Building y cuando el más mínimo error te puede dejar ahí sepultado para siempre, no sin antes comprimirte como una lata de sardinas debajo de la pata de un elefante.

Así como en 1912 el hundimiento del Titánic nos recordó que estamos muy lejos como humanidad de poder dominarlo todo, aun habiendo llegado al año 2023, en especial después de una Pandemia como la que acabamos de vivir, nos falta mucho, pero muchísimo para controlar y llegar a esos albores a los que aspiramos algún día poder conquistar. Si, se ha llegado a la luna, se ha llegado al mismísimo Titánic, pronto a Marte, a Júpiter si se quiere, pero solo para unos cuantos, no para toda la humanidad.

Descansen en paz los pasajeros del Titán.