Norman Patrón. Melbourne Australia. Sábado 25 de enero de 2025.

Para alegría de muchos, un ejemplo de perseverancia, algo que para infinidad parece algo imposible, lograr no solo un torneo de Grand Slam del tennis, sino el hecho de no darse por vencido hasta lograr el objetivo sin importar los años que tengan que pasar. Cuando el 70% de los encuestados daban por ganadora a Sabalenka, entre ellos yo mismo, pues por la trayectoria que le conocíamos desde hacía ya muchos años a Keys realmente no le dábamos posibilidad alguna frente a la bicampeona, nos sorprendió a todos al derrotar a la bielorrusa que ya dábamos por ganadora. Keys, de 29 años, originaria de Illinois, Estados Unidos gana su primer Grand Slam, no del año, no de Australia, sino de toda su carrera. Maddy lo hizo después de participar en al menos 49 torneos, otras se retiraron sin ganar uno nunca.

Una persona humilde, siempre simpática, siempre amable con sus fans, pero que no pasaba de la segunda o tercera ronda, recién casada, sencilla, jugó el torneo de su vida, el juego de su vida hasta el momento. Madison simplemente lo logró, y lo logró bien, todo la favoreció, todo le salió, aun con 29 años, le ganó a la 1 y a la 2 del ranking mundial. Madison lo hizo. Un juego para la memoria del tennis mundial. A partir del lunes Keys ya será la 7 del mundo, un gran año la espera. Sabalenka seguirá siendo la 1, pero sin el trofeo de Australia.

Los parciales 6-3, 2-6 y 7-5. Keys se lleva la primera gran victoria del año. Grande, grande Madison Keys.