Los problemas de un creativo en “El libro de las soluciones”

Norman Patrón. Jueves 27 de junio de 2024.

Realmente crear no es cosa fácil, siempre es empezar, buscar por donde deben ser las cosas, a veces es rápido, a veces una locura. Ésto ilustra el director francés Michel Gondry, en su más reciente cinta que lleva por nombre “El libro de las soluciones”, la historia de Marc, un joven director cinematográfico que hace lo imposible por encontrar la solución que convenza a sus clientes para seguir invirtiendo millones en una producción que al menos en las primeras revisiones resultan un fiasco, animándolos a retirar su dinero después de ver que aunque quiera hacerse el muy creativo solamente presenta pura basura en la pantalla.

Es entonces que se desarrolla la trama, por su puesto aquí nadie va a leer en qué termina, pero la personalidad, en especial la condición humana que es muy característica del cine francés se vuelve la temática principal, los problemas literalmente mentales que de por si vuelven más loco a un director que ya estaba en tratamiento psiquiátrico, lo llevan a frustraciones, peleas con sus colaboradores, inversiones ridículas, estancias de trabajo en lugares extraños y hasta la aceptación de puestos políticos para librarse de la tensión que representa realizar una película que no tiene ni pies ni cabeza, la verdad es que el personaje de Marc, tal vez quisiera representar a un genio de la pantalla, pero a todas luces se ve que es, si ya nos metemos en un estudio psicológico más profundo un ser que se siente cineasta pero sin un método para resolver muy establecido, pues la realidad es que hasta en la creatividad hay metodologías y reglas para conseguir el éxito, es evidente que se vuelve loco porque en el fondo no conoce ni sabe realmente en qué diablos está metido, lo que debe representar fuera de la pantalla, eso si, a millones de personas en todo el mundo y tal vez, ese es el objetivo, aunque no hay que pecar de perfectos porque hasta al más experimentado se le han de ir las cabras con cada nuevo proyecto que llega a sus manos.

Por periodos la cinta a veces se torna aburrida porque no es el show de superhéroes que aclama el público cuando va a una sala de cine, incluso es casi siempre esa historia de conseguir representar una obra en un medio habitual, como poner una función de teatro, realizar una pintura, etc. Pero ahora es una película, un cineasta, un creativo de la época contemporánea. En si destaca la actuación, la dirección, la historia, lo demás no es muy relevante, la fotografía es estándar, la edición también, los efectos especiales nulos, salvo un camión viejo para editar las tomas es lo único mágico y unas pequeñas animaciones, destaca también la aparición del mismísimo Sting, que por la cercanía de Francia con Inglaterra es mas posible verlo por allá que en zonas como América, por supuesto, la voy recomendar, es una interesante propuesta que se estrena este jueves en las salas cinematográficas y que vale la pena contemplar. Como lo dije antes, es muy posible que muchos se vean reflejados en las problemáticas que termina afrontando Marc para la realización de su nueva producción.

Ah, por cierto que todo el proceso de Marc, con el que quiere tratar de ayudar a los demás a resolver lo que le pasó a él lo termina escribiendo en un libro que al final de cuentas resulta ser lo menos relevante.